PUBLICIDAD
Filamento de impresión 3D antimosquitos
StudyPlan anuncia el lanzamiento de un filamento antimosquitos para impresoras 3D caseras.
La firma especializada en el segmento de impresión 3D doméstica, StudyPlan, presenta su último lanzamiento. Se trata de un nuevo filamento TPU (Poliuretano termoplástico) flexible con aditivos especiales como la citronela y aceites naturales que le confieren propiedades repelentes para los mosquitos. El diseño y la fabricación de este nuevo filamento para impresión 3D está realizado íntegramente en España.
StudyPLAN que ya comercializa una amplia gama de impresoras 3D y consumibles como PLA, PLA reforzado, o ABS; incorpora ahora esta nueva gama de filamento antimosquitos a su portfolio. En este sentido, el nuevo filamento se sirve en bobinas de 250, 500 y 1.000 gr. En cuanto a los precios, son de 17,50; 34; y 65,75 euros, respectivamente.
Como comenta Stephen Bernard, Director de Ventas de StudyPlan, El mercado nos sorprende constantemente con nuevos filamentos de excelente calidad y que abren nuevas posibilidades en sectores aun no explotados con esta tecnología. Interviene un montón de variables en un termoplástico, desde la propia composición química de los componentes, y un abanico cada vez mayor de aditivos como cobre, madera, corcho, fibra de carbono o, como es el caso de este nuevo producto que lleva citronela, un conocido repelente de mosquitos.
El material consiste en TPU 96A de 1,75 mm de diámetro, y resulta compatible con la mayoría de impresoras 3D de tecnología FDM. La duración de los efectos de la fragancia antimosquitos puede ser de hasta dos años, dependiendo del uso, según StudyPlan.
Un mercado creciente…y solidario
El mercado doméstico de filamento termoplástico para impresoras 3D de tecnología FDM se calcula en más de 30.000 usuarios a nivel español, según la empresa StudyPlan. Un mercado que se resintió durante el estado de alarma de la pasada primavera, cuando -según la firma- los principales fabricantes de filamento se quedaron literalmente sin materia prima para seguir produciendo.
De hecho, durante esos meses, la demanda de filamento se multiplicó por 10. Entonces miles de Makers se volcaron para producir piezas con las que ayudar a frenar el avance de la pandemia. En este sentido la ola de solidaridad de impresores 3D anónimos se disparó. Así, se organizaron para fabricar piezas en PLA y ABS para respiradores, viseras y salva orejas destinadas al personal sanitario de todo el país.
*Para más información: http://studyplan.es/http://studyplan.es/
11.11.2020