Igus:bike, una bicicleta fabricada con plástico reciclado
13/06/2022
Sin mantenimiento ni corrosión, la bicicleta igus:bike, que llegará al mercado a finales de año, establece nuevos estándares de movilidad sostenible.
Para contribuir a la economía circular del plástico, igus, especialista en plásticos técnicos para el movimiento, ha presentado su igus:bike. Se trata una bicicleta urbana robusta y duradera, fabricada íntegramente en plástico, desde el cuadro hasta los cojinetes y la cadena. En su versión reciclada, empleará plásticos reutilizados de un solo uso.
La idea de esta bicicleta le surgió a Frank Blase, CEO de igus, en sus vacaciones en la playa. Conversando con los empleados de una empresa de alquiler de bicicletas, éstos le explicaron los principales problemas de corrosión que sufren estos vehículos por las condiciones de las zonas costeras.
La igus:bike no se oxida
La igus:bike es más fácil de mantener que cualquier otra bicicleta. Los usuarios pueden dejarla a la intemperie ante cualquier climatología y limpiarla en unos segundos de un manguerazo. «Como todos los componentes son de plástico, ninguna pieza de la bicicleta se oxida; ni siquiera los engranajes, los cuales durante mucho tiempo fue impensable que pudieran fabricarse en plástico«, explica Blase.
En todos los componentes de la bicicleta se utilizan plásticos ligeros de alto rendimiento que no requieren lubricación; desde los rodamientos de bolas de dos componentes en las ruedas hasta los cojinetes de fricción en la tija del sillín, las palancas de freno y los pedales. Todas estas piezas llevan integrados lubricantes sólidos y garantizan un funcionamiento en seco de baja fricción. De esta forma se garantiza que la arena, el polvo y la suciedad no se adhieran.
Los plásticos optimizados tribológicamente de igus se utilizan con éxito desde hace mucho años y actualmente se emplean en más de 70 industrias: automóviles, tractores y robots, entre otros. Desde hace décadas tienen muchos seguidores en el sector de la bicicleta, donde llevan mucho tiempo demostrando su eficacia en bicicletas de montaña y bicicletas eléctricas.
Una bicicleta con mucha I+D
En los laboratorios de desarrollo de igus, ocho ingenieros trabajan actualmente en el diseño de todos los componentes móviles de la bicicleta «full-plastic». Los rodamientos de bolas, los frenos, los piñones, los engranajes y las transmisiones están siendo coordinados por Andreas Hermey, director de desarrollo de las cadenas portacables.
Los técnicos trabajan en estrecha colaboración con la empresa de bicicletas MTRL de Holanda. Los desarrollos ya probados de igus se adaptaron a la nueva aplicación. El resultado son unos componentes plásticos de funcionamiento suave, silencioso y duradero.
Asimismo, igus:bike supone una plataforma interesante para que fabricantes de bicicletas de todo el mundo puedan avanzar en esta tecnología. «Queremos que la industria de la bicicleta pueda producir bicis de plástico«, dice Blase.
En este sentido, la plataforma igus:bike pretende convertirse en el punto de referencia para los fabricantes que quieran construir una bicicleta de plástico; y, también, para todos los fabricantes de componentes del sector, como cuadros, ruedas, transmisiones y piñones de plástico. La plataforma ya está acogiendo las primeras colaboraciones empresariales. Un ejemplo es Helix.eco para plásticos reciclados, pero próximamente le seguirán muchas más.
Más detalles de la bici de plástico de igus
El otro socio es MTRL, una start-up neerlandesa que ha conseguido colocar 400 bicicletas con cuadros y ruedas de plástico en las carreteras de los Países Bajos. La empresa de bicicletas empezará a producir y vender un modelo para niños y una bicicleta para adultos en las ciudades a finales de este año.
El lanzamiento en Alemania será a principios de 2023. También se han previsto otras versiones, como una bicicleta eléctrica. En el futuro, la bicicleta totalmente de plástico estará disponible tanto en una variante hecha de plástico nuevo como en una fabricada totalmente con material reciclado.
Los primeros prototipos, producidos y probados con éxito, estaban hechos de material procedente, por ejemplo, de viejas redes de pesca. La bicicleta para adultos de plástico virgen costará 1.200 euros, mientras que la de plástico reciclado tendrá un recargo de 200 euros.
La empresa estudia también la implementación de un sistema de monitorización de estado mediante los «smart plastics» de igus, que permitiría usar el smartphone para ver cuántos miles de kilómetros más puede aguantar la bicicleta.
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