KRIOPLAS: molienda criogénica para obtener polvo fino y ultrafino

14/01/2025

Con el proyecto KRIOPLAS, AIMPLAS aborda la molturación mediante molienda criogénica con nitrógeno líquido de materiales termoplásticos con la finalidad de obtener polvos finos y ultrafinos.

AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, amplía sus capacidades en micronizado criogénico para el desarrollo de materiales en polvo ultrafinos de interés para la industria a través del proyecto KRIOPLAS, una investigación financiada por la Dirección General de Innovación de la Generalitat Valenciana.

Trabajar con polímeros en polvo aporta ventajas significativas en distintos procesos productivos y puede aplicarse en sectores de alto valor añadido como el de la química sostenible, concretamente la mecanoquímica, que exime la necesidad de utilizar disolventes en las reacciones, así como en el campo de la fabricación aditiva SLS (Sinterizado por Láser Selectivo). La obtención de partículas de plástico finas también facilita un salto cualitativo en sectores más tradicionales como el rotomoldeo, para la producción de compuestos, o en procesos de reciclado de materiales plásticos.

Con el proyecto KRIOPLAS, AIMPLAS aborda la molturación mediante molienda criogénica con nitrógeno líquido de diferentes materiales termoplásticos con la finalidad de obtener polvos finos y ultrafinos para aplicaciones de alto valor añadido en mecanoquímica, fabricación aditiva SLS y rotomoldeo, entre otros sectores.

Susana Otero, investigadora en Ciudades, Movilidad y Energías sostenibles, ha afirmado que “el proyecto KRIOPLAS contribuye al desarrollo de materiales para una industria más sostenible que permite un consumo más eficiente de recursos y materiales, elimina la necesidad de utilizar disolventes en las reacciones químicas y permite el desarrollo de nuevos materiales para las tecnologías de fabricación aditiva o el rotomoldeo”.

Molienda criogénica para la obtención de material en polvo

La molienda criogénica emplea nitrógeno líquido para congelar el material antes de alimentar el molino y preservar una temperatura baja en todo el sistema. Se utiliza para materiales blandos o muy resistentes que no se pueden moler a temperaturas normales. Se trata de un medio eficaz para obtener partículas ultrafinas y uniformes, a la vez que mejora la calidad y la estabilidad del producto, así como la tasa de producción.

A partir de esta tecnología, AIMPLAS puede obtener material en polvo y elastómeros termoplásticos, como el poliuretano y el caucho, hasta que sus partículas alcancen entre 600 y 300 micras, para los polvos finos, y menos de 100 micras, para los ultrafinos.

Cada material termoplástico tiene propiedades diferentes, por lo que el proceso de micronizado criogénico debe adaptarse a las características de cada compuesto. Por ello, es imprescindible analizar y determinar la configuración más adecuada de molienda por tipo de material y delimitar el micronizado para cada uno de ellos.